El mínimo análisis que hagamos sobre la política impuesta por el actual régimen de la derecha nos lleva a aseverar que el entorno político se caracteriza por la crisis económica, la ingobernabilidad, la corrupción e impunidad, y por ello es inevitable un mayor grado de polarización política y social. La deuda interna de nueva cuenta ha alcanzado niveles históricos, aunado a ello la cantidad de trabajadores asciende a cientos de miles, esto en un escenario extremo que se recrudece con la ruina y el abandono del campo mexicano.
Desde el inicio de su gobierno, Calderón se autonombro “el presidente del empleo” pero los hechos demuestran lo contrario. No obstante, la pesada carga de la política neoliberal y el ascenso de la criminalización de la protesta social existen fuertes indicios de resistencia a la política antiobrera, miles de obreros, maestros, estudiantes y campesinos han respondido con importantes movilizaciones contra el ataque continuado a sus condiciones laborales y de estudio, de hecho en todo el país han emplazado a huelgas y en muchos casos las han estallado.
A nombre de la “Nueva Cultura Laboral” los trabajadores de la educación reciben ataques a las formas de selección y preparación de los maestros. En el pensamiento de la derecha existe una desconfianza respecto de escuelas y cierto tipo de profesores. A la juventud le depara un futuro desolador, desde ahora se le ha sometido a las exigencias del mercado acorde con el mentado ambiente competitivo, de ahí que le será imposible acceder a una educación integra y de calidad. Una prueba de que la derecha continuará con esos ataques contra la juventud lo constituye el Sistema Nacional de Bachillerato (SNB) y la Reforma Integral de la Educación Media Superior (RIEMS) cuyo cometido es vigilar al sistema educativo, para que sea normal, moral y socialmente responsable a los intereses de la burguesía.
Otra de las protestas obreras, símbolo del descontento social se manifestó en la primera quincena de septiembre del 2008 en donde a raíz del decretado gasolinazo se dio lugar a protestas y movilizaciones principalmente protagonizadas por transportistas en un ambiente tensando por el desempleo, la migración, la delincuencia y las explosiones en ductos de PEMEX.
En el colmo de lo absurdo, los neoliberales dicen que combatirán la pobreza, mientras preparan la “ayuda”, apenas una bicoca para cubrir las grandes necesidades de 44 millones de pobres. A la derecha le interesa el control de la población para asegurarse la obediencia política y una fuerza de trabajo dócil y útil en relación con las demandas de su amo, el imperialismo yankee. La implementación de la criminal Ley del ISSSTE no tiene nada de indulgencia, va del planteamiento a la ejecución inmediata, contempla la aparición de la violencia perpetrada por criminales con uniforme policíaco, principalmente contra los sindicatos obreros, la disidencia magisterial y las organizaciones populares como lo fueron los casos de Puebla, Morelos, Oaxaca, Chihuahua, etc., donde la violación sexual esta oficialmente condonada como arma de guerra contra la población inconforme.
Para “Felipe el Breve”, la militarización del país se decide por la urgencia de la acción gubernamental. El hecho de que la secretaria de la Defensa Nacional reciba 34 mil millones de pesos y que el IFE haya destinado 18 820 millones de pesos para la farsa electoral revela que el orden social que la derecha abandera descansa sobre bases desprovistas de un sentido humano.
En el caso de la lucha contra la crisis se muestra cada vez con más claridad que las reivindicaciones de los trabajadores por mejores sueldos deben ligarse con la lucha contra las privatizaciones, contra la militarización del país y por la defensa de las conquistas democráticas.
En este sentido, no basta con levantar la consigna de aumento salarial y baja de los precios de la canasta básica, hay que añadir también en las plataformas reivindicativas el reparto del bono de desempleo para el proletariado que vive en miseria extrema. Denunciar que los programas asistenciales no redistribuyen el ingreso, debe ser una tarea prioritaria. En muchos de los casos la derecha ha sabido establecer pacientemente una red de operaciones políticas; con la tapadera de la ayuda médica y social tolerada por programas asistencialistas tipo “oportunidades” para fortalecer electoralmente al PAN, incluso el PRI hace lo mismo, donde gobierna se lleva la parte de león para consolidar sus programas electoreros y su proceso de refundación.
Es tan notorio el proceso de crisis de liderazgo de FECAL y tan vertiginoso el avance de la descomposición social, que los imperialistas completaron recientemente el cuadro al declarar que sus engendros son lo mejor del área, Obama homenajea a la Juez Sotomayor y el embajador de EUA declara que México es un país con liderazgo. Mientras, la feudalización del narcotráfico avanza a marchas forzadas en estados enteros y gobiernos municipales.
Desde El Comienzo reivindicamos la necesidad de mantenernos en los “viejos” principios del marxismo para responder a quienes niegan la realidad del atolladero económico y que anuncian la agravación brutal de las condiciones de vida de los trabajadores.
Porque entramos cada vez más en una espiral represiva debemos adoptar medidas de seguridad que permitan asegurar el orden, la integridad de las organizaciones políticas y sociales. La idea es garantizar la realización de todas nuestras iniciativas, proteger política y organizadamente todo lo relacionado con la vida interna de nuestras organizaciones. La militancia debe pronunciarse no mediante individualidades sino a través de sus órganos y acciones comunes.
Ir contracorriente significa la lucha contra las secuelas del estalinismo, el oportunismo, la indigencia teórica, el pragmatismo, el espíritu sectario, etc. por ello es importante acentuar el conocimiento del marxismo, en el entendido que pensamiento y acción son dos componentes del mismo fenómeno. Aunque no nos hallamos en un periodo insurreccional, hoy debemos avanzar aprovechando todas las manifestaciones de descontento para hacer progresar la lucha. La autodefensa del movimiento de masas, la ruptura del encuadramiento burgués, no deben ser actos desesperados sino expresión de un esfuerzo común. Reflexión y discusión colectiva son los signos fundamentales de la vida del proletariado, para comprender la importancia de la extensión y articulación de la lucha unitaria CLASE CONTRA CLASE.
Sobre la base de estos planteamientos impulsamos la lucha por educación, vivienda digna, oportunidades de empleo y satisfacción para los trabajadores.
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